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Un fracaso de Estado

Durante siglos, nuestra república no ha sabido dar respuesta a uno de los temas más estructurales que todos los países deben abordar; la inclusión de sus pueblos originarios. Desde la mal llamada “pacificación de la Araucanía” hasta los recientes incidentes en la comuna de Curacautín, históricamente Chile no ha podido llegar a buen puerto en la relación con sus antepasados.

Ante eso, como toda problemática que no se resuelve durante siglos, el conflicto ha escalado a niveles complejos, que nos presenta una crisis que no parece tener solución sencilla. Hoy la brecha entre nuestro Estado, y los pueblos originarios es casi irreconciliable, y la violencia rodea que este conflicto es una consecuencia cientos de años de fracaso institucional por parte de nuestro Estado.

Esto se debe a que en más de 500 años no hemos sido capaces de incluir y valorar nuestras raíces como país, siempre hemos estado muy hambrientos por consumir culturas extranjeras, pero poco hacemos para enaltecer la tradiciones y visiones de nuestros antepasados. Por eso, hoy cuando ya gran parte del daño está hecho, solo vemos violencia y fuego cruzado en este conflicto.

Por lo tanto, urge más que nunca una política de Estado reparatoria, reivindicatoria, y sobre todo pacificadora, que logre lo que no se ha podido hacer en toda nuestra historia republicana, que es lograr integrar a los pueblos originarios, y poder darle el espacio que merecen sus culturas milenarias en nuestras instituciones.

Necesitamos un nuevo trato hacia nuestro ancestro, y hacia la forma en que hoy como sociedad nos relacionamos con estas etnias. Las huelgas de hambre, los canticos racistas, la quema de colegios y municipalidades, poco ayudan a solucionar este conflicto, que cada día que pasas se hace más complejo y sangriento.

Quizás ya estemos demasiado tarde para poder buscar una solución, sin embargo, es nuestro deber como Estado, aunque sea 500 años tarde, propender hacia una solución dialogante y reparadora para poder lograr que de una vez por todas la cuestión indígena mejore, y no empeore.

Lucas Serrano Barraza

Cientista Político Magister en Política Públicas de Universidad de Chile, Docente Universitario, Director Administración Pública Advance USS.

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